LAS DESIGUALDADES SOCIALES Y ECONÓMICAS HAN AUMENTADO LA VIOLACIÓN A LOS DERECHOS HUMANOS EN OAXACA. DICE OCTAVIO DOMÍNGUEZ.

El candidato a presidir la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, Octavio Cesar Domínguez, lamentó que a pesar de haber avances significativos en materia de derechos humanos, Oaxaca sea un estado rezagado en ese sentido, esto de debe, dijo “al crecimiento del crimen organizado, de los diversos cárteles de la droga, la violencia política y las grandes desigualdades sociales y económicas, han aumentado la violación de Derechos Humanos de manera integral dejando a las personas y comunidades desprotegidas y en riesgo.

Explicó que los reportes sobre abusos por parte de la Policía, las fuerzas de seguridad y varias instancias del servicio público continúan y la impunidad en todos los ámbitos sigue siendo cotidiana. Y es que en Oaxaca históricamente los defensores de derechos humanos, defensores de las tierras y territorios, de los patrimonios naturales y culturales de las comunidades quienes tratan frecuentemente de apoyar a las víctimas y revelan los abusos, enfrentan cada vez mayores ataques.

En ese sentido el abogado de origen indígena chinanteco, enfatizó “las mujeres oaxaqueñas, pueblos indígenas, niños, niñas, adolescentes y personas migrantes sufren discriminación estructural y violencia sistemática pero sus probabilidades de protección, prevención, sanción y de obtener reparación son escasos”, por ello detalló que a pesar de tener declarada la Alerta por Violencia de Género contra las Mujeres en 40 municipios y de avanzar cuantitativamente en la judicializción de los casos, en los resultados el Sistema de Justicia continúa impune, ya que quedan sin resolver y la mayoría no son nunca eficientemente investigados.

Prácticamente nadie ha sido condenado por la mayoría de crímenes y violaciones de derechos humanos, por lo que nos apremia cerrar la brecha de aplicabilidad entre normatividad y efectividad, como política garantista de los Derechos Humanos, dijo Octavio Domínguez.

De tal manera y en caso de ser elegido por el Congreso del estado como defensor, se compromete a actuar en estricto apego a la ley y a los principios rectores que rigen al servicio público: legalidad, objetividad, profesionalismo, honradez, lealtad, imparcialidad, eficiencia, eficacia, equidad, transparencia, integridad y competencia por mérito, sobre todo correspondiendo a la confianza de todos los sectores de la sociedad “trabajaré con pasión, firmeza, autonomía y transparencia, asimismo actuaré con sabiduría, inteligencia, prudencia y razón. ¡En mi gestión tengan la certeza de que no habrá simulación!, concluyó enérgico el candidato a defensor, quien se posiciona como el mejor perfil para ocupar el .