SE ESTÁN MURIENDO LOS CULTIVOS DE LIMÓN, PAPAYA POR LAS MINAS,Y TRATARAN DE ENTRAR A MAS LUGARES EN EL ISTMO.
https://noticias-ixtepec.blogspot.com/2018/05/se-estan-muriendo-los-cultivos-de-limon.html
Deja mina "tierras
flacas" en Nejapa, Oaxaca
Desplome productivo; agua,
"con lumbre"
NEJAPA DE MADERO, Yautepec,
Oax.- Los desechos que la mina El Águila vierte al río Tehuantepec o Grande, en
San José de Gracia, han secado el 40 por ciento de 50 hectáreas de cultivo de
limón. Esa es la certeza de productores de este municipio: su temor, que el
daño se extienda a las 300 hectáreas de tierras de donde extraen papaya, pepino
y tomate verde.
Los primeros árboles que desnudó
el agua fueron los 450 que, en una huerta de 1.5 hectáreas, tenía Constantino
Martínez Miguel. De ese plantío durante una década extrajo limones. Ahora
tienen el mismo valor que si estuviera repleta de espinos.
La huerta de Constantino, en
el paraje Los Corralitos, a 4 kilómetros de la entrada principal de Nejapa
-municipio situado a 130 kilómetros de la ciudad de Oaxaca- se nutría con el
sistema de riego que alimentaba el río que “viene de muy lejos”, pero que al
pasar por San José de Gracia, en inmediaciones de Totolapa -donde desde el 2010
opera la mina El Águila- cambia sus propiedades por una maldición.
El limón que cosechaba
Constantino no se da más. Casi todo el año, pero sobre todo en las temporadas
buenas, se cosechaba hasta una tonelada dos veces por semana. La Central de
Abasto de la ciudad era el punto de comercialización de esa producción.
image_5.jpg
Cambiar la siembra de frutas
por agave, la solución emergente que encuentran productores. FOTO: Emilio
Morales
Por muy barato que estuviera
el kilo de limón “saca uno para irse la pasando, pero como ahorita se secaron,
no hay nada de producción”. La suya es la única huerta que se ha secado por
completo, pero “ya hay otras que se están poniendo mal”.
Entre más los riegan, más se
secan
Andrés Romero Omaña no
necesita ser ingeniero ni contratar a uno para asegurar que sus tres hectáreas,
con mil árboles de limones, terminarán despojados de hojas porque “conforme va
pasando el tiempo”, los efectos del agua de la mina que llega hasta aquí “va
aumentando”.
Las hojas de los árboles que
ahora debieran estar verdes, se tornan amarillas. “Uno que otro limonar ya se
ha secado”, dice sin disimular la preocupación de que la producción de este año
ha bajado porque, en el 2017 “le echamos más agua contaminada”.
Durante el año pasado a la
semana realizaban dos cortes en el huerto, en cada uno obtenían 1.4 toneladas
que eran suficientes para llenar 70 arpillas de 20 kilos cada una. Así se
mantenían en dos temporadas que duraban dos o tres meses, cinco meses en total
al año.
image_6.jpg
Cultivo de papaya afectado.
FOTO: Emilio Morales
No tienen duda, “es un
problema del agua porque desde hace dos o tres años es más “salubrica”, cuando
se va secando el río y tiene poca agua se siente más porque inclusive deja
marcado el terreno, así blanco, como salitroso”.
Malas cuentas
La cuenta de su desventura la
lleva Saúl Ramírez Sánchez, un productor que en su huerto de 1.5 hectáreas ya
ha identificado 70 árboles secos de los 400 que tiene.
“Se empezaron a secar en 2017,
uno que otro, pero este año empezó en serio, va aumentando día con día tres o
cuatro, constantemente se están echando a perder”, dice con voz suave,
escondiendo la desesperación.
Basta recorrer la huerta para
ver la fatalidad que predomina en este pueblo de cuyas tierras la riqueza
empieza a ser un fantasma.
“Las tierras van a quedar
muertas”, sentencia y cuenta la desventura: “Apenas el sábado llené 40 bultos
de 17 kilos de limón” e inevitablemente compara:
“El año pasado podía sacar de
la misma huerta hasta 80 o cien por corte porque los árboles estaban cargados,
pero los palos enfermos dan poco, el palo bueno es el único que rinde”.
La mina
La mina El Águila es operada
desde 2010 por Don David Gold México SA de CV, que pertenece al grupo
estadounidense Gold Resource Corporation.
Se localiza en el kilómetro
115 de la carretera federal 190 que comunica a Oaxaca con el Istmo, en San José
de Gracia, en San Pedro Totolápam.
Es una de las empresas del
sector minero-metalúrgico
Comercializa oro y plata
Cuenta con vetas diseminadas y
tres zonas mineras localizadas en San José de Gracia (Totolapam), Guelavila
(Cobre Grande) y El Mogote (Albarradas).
¿Qué extrae la mina?
En la ficha de registro del
Sistema de Información Empresarial Mexicano, se señala que extrae plomo y zinc.
En Enero de 2017 fallecieron
los mineros Daniel Jiménez Ruiz y Roberto Díaz Díaz por un derrumbe y otro por
la caída de una plataforma.
El agua-lumbre que arroja la
mina
Para Isidro Martínez Miguel,
quien aprendió a trabajar el campo junto con su padre Eugenio Martínez, cuando
llevaba a sus ocho hijos “al terreno”, el río Grande “viene de muy lejos” a
alimentar los cultivos, pero es en San José de Gracias donde “empieza la
lumbre”, por el agua que sale de la mina.
“La verdad tenemos miedo, qué
podemos hacer, si el Gobierno ya dio permisos”, se cuestiona sin vislumbrar
siquiera una posibilidad de solución.
Por ahora, su desgracia ha
empezado con el limón, “pero tememos que afecte los huertos de papaya, melón,
sandía, pepino y al rato termine con todo”.
image_8.jpg
El color blanco que queda en
las piedras del río cuando se seca el
agua que desecha la mina. FOTO: Emilio Morales
¿Todo en orden?
Para el presidente del Comisariado
Ejidal, Artemio Martínez Sosa, el “perjuicio” que enfrentan los cultivos de
este municipio “lo están haciendo unos tubos de la mina (El Águila) que
desembocan al río Grande, las plantas de limón se están secando".
En total son 294 productores
registrados y serían 300 hectáreas que terminarían por secarse, puesto que se
se riegan con agua del río Grande.
“Se siembra de todo, papaya,
miltomate, maíz, frijol, melón, sandía y pepino”, pero por ahora los más
afectados son los 50 productores de limón que en conjunto trabajan 50 hectáreas
de cultivo.
Cuando hablan de las
afectaciones que ocasiona la operación de la mina en San José de Gracia, no
mencionan la palabra cierre ni clausura, son mesurados y cautelosos.
Piden planta de tratamiento
El presidente del Consejo de
Vigilancia, José Alfredo Olivera García, se anima a pedir que la empresa ponga
una planta tratadora de las aguas que desechan directamente al río.
“Si se llegara a comprobar que
hay perjuicios, a lo mucho pediríamos una compensación, pero las autoridades de
la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) nos explicaron
que todo está en regla”, expresa.
A pesar de esa explicación
oficial, Fidel Díaz Miguel está convencido que la operación de la mina es la
responsable del daño que alcanza parte de las cuatro hectáreas que en la
agencia de Ánimas siembra todas las variedades de frutas y verduras que puede.
image_4.jpg
Los cambios en el lecho el río
por el paso de los desechos de la mina El Águila. FOTO: Emilio Morales
La tierra como si llevara
lumbrePrimero empezó a ver problemas con la papaya. “Hace dos años que la
tierra quedaba blanca si se regaba con agua del río, la hoja se secaba todo
alrededor, como si le hubiera entrado la lumbre, los árboles no tienen flor porque
la raíces secundarias las quema el salitre”.
En el caso de sus árboles de
mango criollo, “no cargaron esta vez”. Los mayores que veía como reliquia por
tener más de cien años y que le daban hasta dos toneladas por corte, le
advierten que se van a secar junto con otros dos que están más tiernos.
La reacción de los productores
ha sido empezar a abandonar sus cultivos, sembrar algo de temporal como el
agave, que no necesite el agua de riego que alimenta el río porque, a pesar del
agua y el fertilizante que reciben, los árboles se secan como si debajo de la
tierra hubiera lumbre.
La tierra como si llevara
lumbre
Primero empezó a ver problemas
con la papaya. “Hace dos años que la tierra quedaba blanca si se regaba con
agua del río, la hoja se secaba todo alrededor, como si le hubiera entrado la
lumbre, los árboles no tienen flor porque la raíces secundarias las quema el
salitre”.
En el caso de sus árboles de
mango criollo, “no cargaron esta vez”. Los mayores que veía como reliquia por
tener más de cien años y que le daban hasta dos toneladas por corte, le
advierten que se van a secar junto con otros dos que están más tiernos.
La reacción de los productores
ha sido empezar a abandonar sus cultivos, sembrar algo de temporal como el
agave, que no necesite el agua de riego que alimenta el río porque, a pesar del
agua y el fertilizante que reciben, los árboles se secan como si debajo de la
tierra hubiera lumbre.
NOTICIAS.
http://www.nvinoticias.com/nota/91705/deja-mina-tierras-flacas-en-nejapa-oaxaca
Publicar un comentario