Resplandece ex convento en Oaxaca

REFORMA

A la intervención del espacio fueron destinados 95 millones de pesos

Virgilio Sánchez

Oaxaca, México. Santo Domingo Yanhuitlán.- Investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) redescubrieron el ex convento de Santo Domingo Yanhuitlán.

A 437 años de su construcción, en esta comunidad que lleva el mismo nombre en la Mixteca oaxaqueña, arquitectos y restauradores hallaron una fachada oculta en la Iglesia, un sistema de drenaje único e imágenes de Cristo que no habían sido mostradas desde hace siglos.

El INAH concluyó la restauración de este ex convento, cuya construcción inició en 1529 y terminó en 1575, tras cinco años y una inversión de 95 millones de pesos.

El arquitecto Juan Urquiaga Blanco, responsable del rescate, comentó que fue realizado un estudio arqueológico para entender la estructura y las funciones de cada espacio. Así encontraron que la fachada original de la iglesia,del siglo 16, estaba oculta tras la fachada actual que fue construida en 200 años después.

"Para estar a la moda, (se elaboró la segunda fachada), ya no les gustó (a los frailes dominicos) la primera", agregó.

Este asentamiento dominico fue el más importante del siglo 16 y estaba compuesto por atrio, portería, claustro alto y bajo, celdas, bodegas, cocina, refectorio, sala de profundis, huerto y el templo.

Urquiaga Blanco relató que en 2007 encontraron el sitio en ruinas, con daños estructurales severos provocados por los sismos y la falta de mantenimiento; una sección de la nave principal del templo ya se había colapsado, lo mismo que en la mayoría del convento.

"Quisimos recuperar su aspecto original. Cuando teníamos la idea precisa de cómo era el edificio, después de hacer calas arqueológicas, fue muy sencillo hacer la reposiciones, eso sí, sin inventar nada", aclaró.

Otro de los hallazgos fue su sistema hidráulico, y en especial, el de drenaje. Los baños de los frailes se ubicaron en la segunda planta, cerca de sus celdas, pero los desechos caían directamente en el primer piso, en un área especial exclusiva, muy bien ventilada, por la cual corría el agua de lluvia, la cual lavaba el canal de desechos.

El ex convento ya está abierto al público, y en los próximos días será puesto en funcionamiento un restaurante para los visitantes.

Descubren Cristos olvidados

En dos salas del convento recién remodelado se exhiben cuatro de los 5 Cristos y 4 figuras policromadas, elaborados en los siglos 16 que no habían sido mostrados desde su creación.

La Jefa de Conservación del INAH, Fernanda Muñozcastillo Manterola comentó que estas piezas fueron halladas abandonadas en el claustro alto, en muy malas condiciones físicas.

Detalló que ya fueron remodeladas y rescatadas por el personal del Instituto.

"Hay otras dos (policromadas) que están con una taque de termitas muy grave. En la procesión de Semana Santa se utilizaba un Cristo diferente, cada familia compraba un Cristo, por eso cada uno es diferente, nunca se utilizaba el mismo", expuso.

La funcionaria federal destacó dos figuras: el Cristo Tailandés, que así fue nombrado por sus rasgos asiáticos; y el Cristo de cuello de Gozne, el cual tenía movimiento a partir de un rótula que le permitía a la cabeza tener movilidad respecto al resto del cuerpo.

La restauradora explicó que el retablo principal de la Iglesia fue otra pieza que ya fue intervenida y concluida.

Expuso que se le adaptó una imagen de Santo Domingo y algunas piezas que con el tiempo se le fueron desprendiendo, y que encontraron almacenadas en la sacristía; además, todas las pintoras por Andrés de Concha en el siglo 16 fueron recuperadas del deterioro.

"El trabajo que hemos hecho es sólo de restauración: limpiar, fumigar y consolidar", agregó.

La especialista comentó que aún trabajan el rescate de los otros 7 retablos de la iglesia, y en la recuperación de los pinturas murales que aún permanecen cubiertas bajo varias capas de otros materiales.

Muñozcastillo destacó que el nuevo museo de sitio tiene la peculiaridad de que exhibe 7 ángeles pasionarios, que pertenecen a los habitantes de Yanhuitlán, y que aún utilizan para procesiones de Semana Santa.